Iniciada en Los Ángeles, esta disciplina comienza a tomar fuerza en diversas partes del mundo gracias a que fusiona el yoga y el baile.
Bailar, meditar y tonificar, ¿será esto posible en el yoga? Pues la respuesta es sí, se le conoce como Yoga Booty Ballet, una técnica que deriva del yoga tradicional, donde se mezclan diferentes ritmos musicales que trabajan de manera conjunta con la meditación y la respiración, te ayuda a liberarte del estrés.
Esta disciplina nace en Los Ángeles, California, donde Gillian Clark (pionera de este movimiento) decidió darle un giro al yoga convencional ante una demanda de practicantes cada vez más jóvenes que buscan nuevas formas de ejercitarse al mismo tiempo que purifican cuerpo, mente y alma.Si eres de los que constantemente se encuentra bajo estrés o sufres de ansiedad y detestas ir al gimnasio, esta práctica es lo tuyo. El Yoga Booty Ballet se encarga de trabajar diversos aspectos como; fuerza, energía, equilibrio, autoelevación y la conexión de nosotros con lo divino.
Como anteriormente se menciona, el Yoga Booty Ballet es una mezcla de Oriente y Occidente, el cual se trabaja a través de la fusión del Kundalini y Hatha yoga, la danza y la meditación, elementos que crean la combinación perfecta que muchos buscan en el gimnasio o en las clases de yoga.¿Cómo se practica?
Diferentes estilos musicales podrás encontrar al practicar el Yoga Booty Ballet como; rock, pop, soul y hasta reggaetón. Sin embargo, el primer paso para comenzar con esta disciplina es realizar una breve meditación con técnicas de respiración para liberar tensiones en un espacio con luz tenue. Si deseas emitir en voz alta algún pensamiento positivo puedes hacerlo, de lo contrario deberás sólo repetirlo en tu mente. Recuerda que no necesariamente deben ser palabras, una imagen puede bastar para llenarnos de energía positiva.
En la segunda fase comienza la actividad física, pues aquí ya se marcan los pasos de baile, los cuales te ayudan a quemar calorías y tonificar el cuerpo. En algunas prácticas se suele ir al ritmo de una coreografía previamente aprendida, sin embargo eso ya depende de cada instructor o practicante.
Para finalizar se realizan asanas de Hatha yoga acompañadas de melodías suaves y lentas que permitan una mayor y mejor relajación al organismo.
Namaste,
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